Después de las Navidades no olvides visitar a tu dentista
No olvides visitar a tu dentista después de estas fechas!
Se recomienda una revisión dental tras la Navidad, ya que es una época del año en la que se suelen cometer excesos que son especialmente perjudiciales para nuestros dientes. Una revisión dental en este momento puede tener un doble beneficio para nuestros dientes.
Todos nosotros, llegado el nuevo año, nos planteamos propósitos de cuidado para recuperarnos tras los excesos navideños. No sólo tenemos que poner atención a los kilos adquiridos tras las copiosas comidas y cenas que hemos realizado, es importante tener en cuenta nuestra dentadura y su recuperación después de la Navidad. Los excesos navideños afectan en gran medida a nuestros dientes y las cifras lo demuestran: el 50 % de las caries se producen en esta época navideña. Por ello, es importante revisar nuestra dentadura para detectar a tiempo las consecuencias que los cambios de rutinas propios de estas fechas hayan podido repercutir en nuestra dentadura. Las principales causas pueden haber sido:
- La relajación en los hábitos de higiene
- Las celebraciones y los brindis con cavas, champagnes, vinos y otras bebidas, poco beneficiosas para nuestros dientes.
- Los cambios en la dieta
- El exceso de dulces propios de estas fechas.
No dejes de lado los cuidados de tu dentadura, ya que si hacemos lo contrario, puede traer consecuencias negativas. Al igual que nuestro cuerpo, nuestros dientes necesitan ser revisados tras los excesos navideños. Es fundamental volver a las rutinas de higiene y a los cuidados diarios. Es importante revisarlos y acudir al dentista si notamos dolor o síntomas anormales en nuestra boca, ya que si no se pusiera remedio, el problema podría ser mayor en un futuro.
Cuidados que nos pueden ayudar:
- La regla básica: cepillar los dientes después de cada ingesta de comida y, al menos, tres veces al día. Nunca hay que irse a dormir sin haberlos lavado y sin haber usado seda o hilo dental entre los dientes.
- Atentos a los colutorios: antes de usar cualquier colutorio es mejor consultar a un especialista para que nos indique el más adecuado para nosotros.
- En la boca no solo hay dientes: se debe mantener una correcta higiene de la lengua y paladar mediante limpiadores linguales o, incluso, con el propio cepillo. Para evitar que las encías se inflamen y sangren, es importante realizar masajes con movimientos circulares en cada cepillado.
- Cambio de cepillo: normalmente cada 3 meses, o siempre que las cerdas hayan perdido la forma y estén despuntadas.
- Tener en cuenta qué bebemos: evitar beber con frecuencia bebidas carbonatadas o zumos ácidos (naranja, limón o pomelo). Son capaces de descalcificar el esmalte de los dientes y provocan el desgaste prematuro. Otras bebidas, como el café, el té o el vino, pueden teñirlos. Usar pajitas para beber estos líquidos podría ser un buen consejo.
- Los cambios no son buenos: un cambio brusco de temperatura en los alimentos provoca aumento de la sensibilidad e, incluso, inflamaciones de los vasos sanguíneos del interior de los dientes.
- Cuidado con el azúcar: las bacterias productoras de caries se nutren especialmente de los alimentos ricos en azúcares. Es importante reducir su consumo y cepillar los dientes inmediatamente.
- Las proteínas, nuestro aliado: aumentar el consumo de proteínas, calcio, flúor y vitaminas A, C, D y K.
- Fumar, perjudica la dentadura: el tabaco provoca pérdida en la permeabilidad de las mucosas, es decir, disminuye la oxigenación de todo tejido, dando lugar al envejecimiento prematuro y ausencia de salud de los tejidos que rodean al diente.
- Básico, visitar al odontólogo: si los excesos navideños han provocado daños o han alterado la salud de los dientes. La visita al dentista tiene que realizarse además, dos veces al año como medida de prevención y para realizar una limpieza profesional.